jueves, 6 de diciembre de 2012

DESAFÍOS EPISTEMOLÓGICOS DE LA ERA ACTUAL


DESAFÍOS EPISTEMOLÓGICOS EN LA ERA ACTUAL

AUTOR: TERESA TEJEDA CAMACHO

MAESTRIA EN DESARROLLO COGNITIVO

 

Introducción

El hombre del siglo XXI se encuentra inmerso en un mundo que cambia día con día, un mundo en el que lo único cierto es la incertidumbre, el no saber qué va a ocurrir mañana. Junto con  esos cambios algunas veces paulatinos, otras, violentos, viene la necesidad humana de hacer frente a las diversas situaciones que se le imponen y por lo tanto le requieren una respuesta inmediata. Muchas veces la intuición es el recurso principal para enfrentar las situaciones novedosas a todas luces complejas; sin embargo, es sabido que la intuición, si bien es recurso valioso en muchas circunstancias, es insuficiente para abordar una situación desde la perspectiva de su complejidad. Esto exige al hombre de ciencia  en la actualidad darse a la tarea de desarrollar  modelos teóricos que  permitan interpretar a la nueva sociedad cambiante y globalizada, determinando con claridad cada problema,  generando estrategias creativas para abordarlos, identificando las distintas dimensiones de un problema y categorizándolas, pero sobre todo, exige que  para poder hacerlo se produzca un cambio en la visión tradicional de las ciencias y sus campos específicos, exige una redefinición epistemológica de ellas

Situación observada

La era  actual enfrenta al mundo a una realidad incierta por los continuos cambios y desafíos que presenta; las ciencias, en su afán de entender y atender lo que ocurre, se parcializan cada vez más y se separan en su intento de aportar cada una su “granito de arena”, provocando con esto una visión incompleta de la realidad y aportado soluciones que solo sirven como paliativos a los problemas. La inadecuada definición de los elementos participantes impide llegar a un acuerdo, haciendo tardías las respuestas que muchas veces sólo conducen a resolver una parte del problema.

Situación deseada

Es necesario que la sociedad en general esté preparada para enfrentar los retos y cambios que ofrece la modernidad; esto requiere  buscar soluciones a los problemas que se presentan, siendo estas  definitivas o  que ofrezcan  al menos reducir en porcentajes más altos las discrepancias presentadas.

Planteamiento del problema

¿Cuáles son los verdaderos y más importantes desafíos que enfrentan las ciencias y cuál debe ser el papel de la epistemología  frente a esos retos?

Hipótesis

Las ciencias han desarrollado un alto nivel de separación, particularidad y especificidad que impide ver los problemas de la sociedad actual en forma global, si las ciencias y la tecnología modernas se reencuentren con la filosofía y se configuran como ciencias filosóficas o tecnologías científicas y al mismo tiempo  la filosofía adquiere un carácter científico y tecnológico entonces se desarrollará una nueva perspectiva epistemológica que permitirá abordar la problemática desde la complejidad que la constituye.

Marco teórico

Esa ciencia  llamada epistemología o también llamada filosofía de las ciencias, “es la rama de la filosofía que estudia la investigación científica y su producto, el conocimiento científico” (Bunge, 2009); esta definición considera elementos conceptualmente distintos a   los mencionados por  Dancy quien la concibe “como el estudio del conocimiento y de la justificación de la creencia” (Dancy, 1993). También se le considera como teoría de las ciencias y se reconoce en ella una falta de claridad en la demarcación de su campo de estudio, al grado de considerarla como innecesaria (Diccionario de Cs. De la Educación). No es casual que se haga crítica a los filósofos y epistemólogos acerca de su papel en las ciencias que estudian, debido a que las fronteras en cada ciencia siempre se menciona que van más allá del problema que se plantea; quizá por eso Einstein mencionaba que la epistemología vista de manera rigurosa no es epistemología sino gimnasia intelectual, ya que ésta se cerró en una problemática pequeña que no atraía la atención de los investigadores científicos (Citado en Bunge (2009),  p.24).

Sin embargo, a pesar de las críticas, es sabido que la epistemología no puede estar al margen de las ciencias ya que estas se constituyen de ella y a través de ella; lo que habría que considerar es su nuevo papel en la construcción de las teorías de la ciencia o del conocimiento. Esto implica que al retomar las ciencias el camino bajo una filosofía racional, ética, práctica, crítica, ontológica y por qué no, estética, en realidad, lo que se obtiene es una nueva epistemología; capaz de ir más allá del ámbito académico, donde por ahora es respetable, a menudo exacta, pero totalmente inútil (Bunge, 2009). El reto es entonces desarrollar una nueva visión, es importante comprender que es posible y es preciso que exista una epistemología útil, dotada de fertilidad, que haga algo más que complicar y criticar las ideas de los filósofos, que rebase los límites del aula y trascienda a partir de sus métodos porque sea capaz de contribuir con la ciencia en la solución de problemas que aquejan a la humanidad.

Principales desafíos de la epistemología

Bunge (2009), menciona que la epistemología “no merece el apoyo de la sociedad si no constituye un enriquecimiento de la filosofía  ni le es útil a la ciencia”. Así mismo, menciona que una epistemología es útil si satisface algunas condiciones, como por ejemplo: 1) es propia de cada ciencia, 2) atiende los problemas filosóficos que se presentan durante la investigación científica, 3) propone soluciones claras y acordes a los problemas  con la realidad, 4) hace distinción entre ciencia y pseudociencia; entre “buscar la verdad o buscar el pan de cada día”, y 5) es capaz de criticar programas y resultados erróneos, pero al mismo tiempo proponer nuevos puntos de vista que prometan corregirlos y mejorarlos.

Desde esta perspectiva, cabe señalar que algunos  desafíos epistemológicos en la era actual son:

·  Acercarse a las ciencias, su objeto de estudio, y contribuir con estas en la reconstrucción de teorías obsoletas.

·  Identificar en las ciencias y sus teorías, las causas de la obsolescencia.

·  Identificar los principales problemas sociales y establecer una red científica para abordarlos.

·  Generar modelos teóricos o metodológicos que puedan eliminar la subjetividad en la investigación.

·  Identificar los cambios que pueden ocasionarse en una situación-problema si se incorpora un determinado elemento capaz de modificarla.

·  Analizar la lógica que se sigue en las ciencias para resolver los problemas.

·  Analizar el nivel de profundidad en el que son atendidos los problemas sociales.

·  Ayudar a definir con claridad y precisión un problema de investigación.

·  Determinar si los problemas en las ciencias no son meramente conceptuales o de conceptualizaciones.

·  Analizar cómo se están interpretando los conceptos básicos en una ciencia.

·  Identificar los nuevos elementos que intervienen en la definición de un concepto, a la luz del desarrollo científico

·  Identificar las múltiples dimensiones de un problema.

·  Hacer una depuración de las verdades que constituyen el conjunto teórico de las ciencias y recategorizarlas.

·  Hacer una distinción entre verdades y creencias de cada ciencia.

·  Analizar  las formas en que se relacionan las observaciones que hace un sujeto y la forma en que establece juicios a partir de estas.

·  Identificar si lo que sustenta una teoría es realmente válido, de lo contrario, explicar de manera sencilla a los científicos las razones para no serlo.

·  Determinar cómo se relacionan en la actualidad el binomio conocimiento empírico y conocimiento científico.

·  Construir modelos en los que se empleen  los recursos cognitivos, desde la intuición hasta el razonamiento formal.

·  Facilitar el acceso al razonamiento formal a todas las personas, no solamente a un grupo selecto.

·  Ayudar a definir con  claridad los límites de los conceptos empíricos y de los conceptos propios de las ciencias.

·  Establecer con las ciencias lo que debe entenderse hoy en cada uno de los conceptos que se utilizan en la investigación científica (indicador, hipótesis, marco teórico, criterio, teoría, ley, etc.) de la misma manera, definir si aplican de manera general, a cada conjunto de ciencias o a cada ciencia particular.

·  Establecer las condiciones necesarias para identificar,  de acuerdo a la naturaleza del objeto de estudio, lo que es propio de este y lo que es secundario o adquirido (análisis ontológico).

·  Valorar los principales riesgos a que se expone un investigador científico en el proceso de investigación y también los riesgos a los que se expone una investigación por causa de los investigadores.

·  Definir cuáles resultados de los que se obtienen en una investigación quedan sólo en el nivel de conocimiento y cuáles pueden llevarse a la práctica.

·  Definir estrategias que permitan hacer frente a las contingencias; de manera particular, aplicables a la vida cotidiana.

·  Identificar los riesgos que se corren cuando se trabaja en una investigación algún asunto cuyos resultados pueden ayudar a resolver un problema pero generar nuevos problemas a la sociedad.

·  Crear estrategias que permitan proceder éticamente en el desarrollo científico.

·  Reconstruir los códigos de valores y valoraciones que deben tener las personas que trabajan en el impulso, desarrollo e investigación científica.

·  Redefinir el valor de la tecnología en las ciencias y en el desarrollo social.

·  Analizar la dinámica social del siglo XXI y todos los factores que se ven involucrados.

·  Resolver los problemas desde la perspectiva de su complejidad.

·  Proporcionar las bases teóricas para atender los problemas complejos.

·  Identificar y realzar el valor de las nuevas ciencias experimentales y el nivel de influencia que tienen sobre las ciencias de las que han emergido.

·  Establecer los principios rectores para impulsar el desarrollo humano a la par del desarrollo científico, económico y tecnológico; que no sea el desarrollo humano justo lo que no alcance a desarrollarse.

·  Facilitar el análisis de la propuesta transdisciplinaria en la educación, haciéndola  más accesible.

Con  seguridad, no son todos los desafíos que enfrenta la epistemología del siglo XXI, existen más, algunos que serán propios de cada disciplina, otros serán exigencia del ser humano, otros podrán surgir de  las necesidades sociales, políticas,  económicas, religiosas o del planeta; sin embargo, si la epistemología quiere recuperar su espacio como ciencia útil, tendrá que ir haciendo su incorporación en cada asunto tratando de definirlo, analizarlo, delimitarlo y resolverlo en conjunto con la ciencias.

Conclusión

La epistemología como ciencia fundamental en todas las ciencias por alguna razón ha perdido el rumbo y se ha transformado en un espacio para los intelectuales y las intelectualizaciones, tanto así que el lenguaje mismo resulta casi siempre  incomprensible a los ojos y oídos de la gente común, muchas veces solo  se comprende por los estudiosos de una ciencia y solamente algunas mentes privilegiadas pueden moverse con soltura en este terreno. Sin embargo, es una ciencia que puede transformarse en algo totalmente útil y revolucionario para comprender, analizar y resolver la problemática del presente.

Es importante que se reconozca la urgencia de involucrarse en la situación actual, incursionando en esta como seres activos; descubriendo la experiencia maravillosa de pensarse pensando y de conocerse conociendo; esto sólo puede lograrse a través del pensamiento y el conocimiento. Descubrir cómo pensamos y cómo conocemos, más aún, cómo construimos nuestras verdades a partir de las experiencias o de otros conocimientos siendo  capaces de justificar nuestras creencias, es un campo que la epistemología de la cognición puede ayudar a construir. La ciencia cognitiva es otro desafío que la epistemología moderna debe enfrentar, amén de los otros mencionados con anterioridad, si quiere de alguna manera, ser actriz en la  puesta en escena de la obra científica jamás escrita.

Referencias

Bunge, Mario (2009). Epistemología. México. Siglo XXI editores.

Dancy, Jonathan (1993). Introducción a la epistemología contemporánea. Madrid, España. Letra e.

Manucci, Marcelo (2010). Contingencias. Cinco desafíos de cambio para una nueva década. Bogotá, Colombia. Grupo editorial Norma.

Velilla, Marco Antonio (2002). Manual de iniciación pedagógica al pensamiento complejo. Bogotá, Colombia. Ediciones jurídicas Gustavo Ibáñez. UNESCO.

HACIA UNA FILOSOFÍA DE LA COGNICIÓN


HACIA UNA  FILOSOFIA DE LA COGNICIÓN

ENSAYO

Autor: Teresa Tejeda Camacho

Marzo del 2012

Podría decir que nada es tan apasionante como descubrir que estamos siendo testigos de una nueva realidad, pero mentiría, sí hay algo más apasionante: sabernos constructores de esa nueva realidad. En este ejercicio pretendo reflexionar acerca de la importancia que tiene la construcción de una nueva epistemología de la cognición; no es mi afán hacer crítica de ningún tipo a las ideas de los filósofos, eso ya lo han hecho muchos, sino tomar de ellos los aspectos que me permitan pensar en una nueva manera de abordar los problemas que  el campo de la cognición nos está ofreciendo, para que  a través de esta reflexión pueda tener al menos una idea de cómo empezar esta difícil tarea de desarrollar los factores cognitivos, procurando mantener un enfoque filosófico y una línea de pensamiento crítico.

Partiré del hecho de que “toda investigación científica puede enfocarse de diversas maneras, cada una de ellas signada por una concepción general de carácter filosófico” (Bunge, 2009 124); es esta influencia de la filosofía en las ciencias lo que quiero reconocer como epistemología, siendo entonces inevitable que esta disciplina científica esté presente en un campo tan vasto de la nueva psicología: la  psicobiología. Pero su participación no debe reducirse sólo a un análisis de los postulados teóricos que históricamente amparan la ciencia cognitiva y sus procesos; eso no serviría de mucho, en cambio, sí empantanaría los nuevos caminos que intenten abrirse en aras de resolver los problemas que se presentan. Será entonces una nueva visión epistemológica de la psicología la que permita desarrollar las bases de la investigación en el campo de la cognición.

“Una investigación se comprende porque, por científica que ésta sea, no puede estar desprovista de supuestos filosóficos” (Bunge, 2009 p.125). Estos supuestos filosóficos que menciona Bunge implican no sólo la definición precisa del problema a investigar, sino la hipótesis ontológica acerca de la naturaleza de los objetos intervinientes, así como los supuestos gnoseológicos acerca de la naturaleza y el alcance del conocimiento posible de dichos objetos. Es entonces la epistemología la que puede servir de andamiaje para estas construcciones conceptuales. No se trata por esta vía de entrar en debate acerca de los conceptos, procesos o funciones que van a investigarse; más bien, de dar por sentado lo que debe entenderse por cada uno de ellos en el trabajo que se realiza, se entienda eso y no otra cosa cuando se investiga. Tampoco es solamente la definición conceptual y sus orígenes lo que se espera de la epistemología, sino la comprensión de las  relaciones  presentes entre los objetos que se investigan, ¡y sus posibles contradicciones! La filosofía de las ciencias será entonces método más que conocimiento, proceso más que punto de partida, síntesis más que sólo análisis en la construcción de una nueva visión científica.

La construcción de una nueva visión de la ciencia cognitiva es urgente, no solo necesaria. Considerar suficientes las formas en que conocemos actualmente los procesos cognitivos puede llevarnos a una parálisis o estancamiento de esos procesos, lejos de desarrollarlos. Se debe considerar poco importante la forma de obtener el conocimiento, ya hemos visto cómo una postura filosófica hace tambalear a otra pero no la derriba por completo; cómo una teoría surge, embelesa a sus seguidores y da pié a otros para someterla a interrogación, darle un nuevo cauce y encontrar otras formas de explicación, generando con esto una nueva teoría, en apariencia más completa que la anterior, pero sin desaparecerla. Poco sentido tendría entonces darnos a la tarea de explicar a la luz de nuestro tiempo por qué por ejemplo el psicoanálisis no nos sirve para explicar el inconsciente como elemento cognitivo, o por qué el conductismo es insuficiente como modelo para generar aprendizajes significativos, o por qué los juicos teóricos de Piaget   parecen errados cuando  muchos estudiantes  llegan a la universidad y aún no han concluido el nivel de las operaciones formales y otros apenas están  en  la etapa de las operaciones concretas. Los nuevos problemas revisten una nueva causalidad, los nuevos problemas requieren nuevos enfoques para resolverse, enfoques inmersos en  una epistemología de la cognición.

En conclusión, como explica Dancy (1985) “la epistemología no implica un cambio de tema, sino que ofrece, por el contrario, una manera nueva de estudiar un tema viejo”; y no es que el objeto de estudio de la ciencia cognitiva sea un tema viejo, aunque sí el conjunto de procesos que lo forman, sino más bien, sea bajo el cobijo de la epistemología que debemos ver esos procesos de una manera distinta a como los hemos visto siempre, de lo contrario, corremos el riesgo de ser víctimas de nuestras creencias y verdugos del conocimiento.

Bunge, Mario (2009). Epistemología. México. Siglo XXI Editores.

Dancy, Jonathan (1993). Introducción a la epistemología contemporánea. Madrid. Letra e.

TRABAJO EN EQUIPO. UN CUENTO PARA REFLEXIONAR


EL DIA QUE LAS LOMBRICES HICIERON LA REVOLUCIÓN

                Ocurrió como ocurren todas las cosas extrañas, cuando nadie las espera y como nadie las imagina. No sé exactamente cuántas eran, pero estoy segura que se contaban por miles, se deslizaban por la pendiente lentamente, casi en secreto, y digo casi porque al ser tantas los oídos finos podrían escucharlas. Tampoco estoy segura a dónde se dirigían, pero puedo suponer que no iban a la tierra prometida, porque de ir ahí se habrían movido con mayor liviandad. Por el paso lento que mostraban me atrevería a pensar que iban a hacer algún pago o a empeñar sus artículos personales a uno de las tantas casas abiertas para este fin….. Pero no lo creo, en realidad no llevaban nada a cuestas, excepto su alargado, rosado, anillado y flexible cuerpo cilíndrico.

                De pronto, algo pareció cambiar el rumbo de las lombrices. Un ruido extraño las hizo detenerse, provocando que unas treparan sobre otras y  comenzaran a enredarse sus cuerpos, tal ha sido la confusión que unas se entrelazaron con otras formando una enorme bola de nieve rosada y empezaron a rodar, sí, a rodar cuesta abajo, y conforme se deslizaba se enredaban más y más de esos individuos alargados, nada podía detenerlas, excepto, claro está, el terreno plano que las vio quedar a la mitad. Miles de cabezas asomaban de la superficie de la bola, y algunas colas que parecían divertirse al golpearlas, sonaron risas queditas y pequeños gruñidos de las lombrices más enfadadas con tal acción.

                Una de ellas, dijo entonces: -“¿así van a estar, esa va a ser su vida, no piensan cambiar? ¡Mírense están todas hechas un lío, no puede saberse  cuál cola es de quién!” 

                Algunas congéneres se sintieron avergonzadas y su rosado color pasó a tornarse entre rojo y violeta; no sé si fue el calor de tanto sonrojamiento, pero la bola se movió otro tanto. Cuando se hubo detenido nuevamente, la encolerizada lombriz que emitiera el regaño minutos antes, volvió a decir, pero ahora con voz calmada:-“¿se han dado cuenta de que logramos rodar sin ayuda de la gravedad? ¡Chicas, nos movimos!

                Las lombrices que al principio se avergonzaron, ahora se sentían especiales, habían sido capaces de generar movimiento únicamente por la fuerza de sus cuerpos enredados.

                De inmediato comenzaron a platicar cabezas con colas y cabezas con cabezas, murmuraban sobre su pequeño éxito y pensaban en la posibilidad de utilizar ese recurso para resolver algunos conflictos, problemas y dificultades de su vida cotidiana. Poco a poco se fueron destrenzando y volviendo al piso; algunas probaban a formar nuevas bolas de nieve pero más pequeñas, en tanto que las demás terminaban de salir de la gran bola; descubrieron que podían desplazarse más rápidamente si se entrelazaban, que si lo intentaban alargadas cual eran, que no tenían que replegarse si algo les obstaculizaba, que en realidad era divertido rodar en lugar de arrastrarse…… La vida adquirió un nuevo sentido.

                A los pocos días podía verse a la colonia de lombrices haciendo grandes progresos. Devoraban larvas y raíces, al mismo tiempo que se divertían. Inventaron juegos nuevos, nuevas formas de trabajo colectivo, y lamentablemente, aunque fuera benéfico, nuevas reglas para la comunidad. La primera regla que se exigió fue la de mantenerse en forma, delgadas y brillantes, con la finalidad de poderse enredar y desenredar fácilmente.  Algunas lombrices alegaban que redondo también era una forma, y querían ser redondas. Para no entrar en controversias, se les permitió engordar y redondas fueron, conforme a su deseo, sin embargo, poco a poco se dieron cuenta de que no podían participar de los juegos y del trabajo colectivo, así que no tuvieron más remedio que volver al camino del bien; platicando sus experiencias al resto, descubrieron que se mantenían ocupadas y sus  esféricos cuerpos tornábanse alargados.

                Una lombriz casualmente descubrió que podía juntar su cabeza y su cola y hacer un pequeño nudo con ellas, otra descubrió que un pequeño empujón la hacía deslizarse como moneda sobre su canto, al poco tiempo todas disfrutaban de la circularidad y de ir y venir sólo con la ayuda de una, ya no de tantas lombrices como ocurría con las bolas. Otra vez el consejo a la reglamentación; al deslizarse de manera individual, miles de lombrices lo hacía al mismo tiempo, ocasionando graves accidentes de tránsito.  Muchas lombrices resultaban lesionadas y con fracturas anulares y uno que otro moretón. Así que se dispuso de horarios para la circulación en esa forma. Nuevamente algunas lombrices inconformes protestaron la medida y quisieron circular a cualquier hora; se les permitió hacerlo y se les asignó una zona especial; al cabo de unos días la mitad de la comunidad había perdido parte de su alargado cuerpo, dando origen a otras lombrices, si se les podía llamar así, carentes de cabeza. Al ver tal situación, las lombrices aceptaron gustosas someterse a la reglamentación.

                No cabe duda que las lombrices vivieron días de gloria, aprendieron a perforar, a rodar, a deslizarse, a normativizarse, a descubrir, a vivir en colectivo, a manifestarse, a alimentarse mejor, a mantenerse delgadas, rosadas y brillantes. No he vuelto a pasar por el lugar, igual y ahora hasta viven en comunidades que ayudan a otras especies con el valor de su experiencia.

FIN
AUTOR: TERESA TEJEDA CAMACHO (05 DE DICIEMBRE DEL 2012)